Pseudo filetes rusos de pollo. En un principio iban a ser albóndigas, pero por casualidades de la vida han terminado siendo filetes rusos.
Efectivamente, a partir de la tercera pelota que hice estaba harta. Me pasa lo mismo con las croquetas, así que suelo utilizar a mi pinche preferida para que las forme.
Así todos ganamos.
No me importa hacer la masa pero sí la forma. Y a ella creo que le pasa al revés. Lo de la cocina no le va demasiado, como ya lo hago yo…
Con planchar pasa igual. Pero me voy del tema.
El caso es que a mí es decirme “me apetece este plato” y ya voy buscándole las vueltas a mi menú semanal (que va surgiendo) para ver cómo me encaja y cuándo hacerlo.
Aunque es mejor que sea de un día para otro, que sino la idea se diluye entre tantas otras.
Si juntamos eso con que ahora me ha dado por ir echándole tomates secos a todo pues ya está la mitad del trabajo hecho.
Exacto, la otra mitad era hacer las bolas de las albóndigas…
NECESITAMOS
Dos pechugas de pollo picadas
Una cebolla
Un calabacin
Un puñado de tomates secos
Albahaca (mejor fresca)
Un huevo
Una lata pequeña de tomates pelados
Tomillo, orégano, pimentón picante y pimienta
CÓMO SE HACE
Empezamos poniendo los tomates en agua tibia durante unos diez minutos.
Mientras tanto podemos ir picando la cebolla lo más fina que podamos. La mitad irá para hacer la salsa de tomate y la otra mitad para los filetes rusos (así que hay que esmerarse). Picamos también el calabacín.
Una vez los tomates estén rehidratados cogemos tres y los picamos, también nos van a servir para los filetes rusos.
En un bol mezclamos la carne picada de pollo, la mitad de la cebolla, los tomates secos y las hojas de albahaca. Salpimentamos y añadimos el huevo. Espero que os hayáis lavado las manos porque ahora hay que mezclar todo muy bien.
Dejamos reposar mientras vamos con la salsa de tomate.
Calentamos aceite a fuego medio en una sartén y sofreímos la cebolla y el calabacín.
Después ponemos los tomates secos. Especiamos al gusto, en mi caso fue una cucharada de tomillo, otra de orégano, media de cayena y un poco de pimienta, que tampoco es cuestión de pasarse.
Cuando las especias estén un poco tostadas añadimos los tomates cortados en trozos pequeños. Subimos el fuego durante unos minutos y después lo bajamos para que se cocinen.
Tapar o no tapar.
Cocinamos tapado 15 minutos. Si vemos que ha quedado demasiado líquido quitamos la tapa y dejamos que evapore el líquido hasta que esté a nuestro gusto.
¡Y todo esto para deciros que tenemos que triturar todo para que quede una salsa ligada!
Así que ponemos el contenido de la sartén en el vaso de la batidora y batimos bien, aunque si quedan trozos no hay mayor problema.
La carne habrá reposado un poco y hacer las albdJAJA los filetes rusos será algo más fácil.
Cogemos porciones, hacemos bolas y aplastamos. Tan fácil como eso, que al final me está quedando una receta muy larga, y solamente es un poco entretenido.
En la misma sartén donde habíamos hecho el tomate ponemos aceite para cocinar los filetes rusos. Con hacerlos vuelta y vuelta es suficiente así que no hace falta echar mucho aceite.
Una vez estén todos listos los ponemos todos en la sartén y echamos la salsa de tomate por encima.
Cocinamos a fuego lento hasta que el interior de la carne esté a nuestro gusto. Más o menos otros 10 minutos.
¡Y a comer!
Anaïs